¿Qué Puede Aprender el Management del Fútbol?
¿Cómo diseñar un estilo de gestión que nos fortalezca y nos permita prosperar en entornos complejos?
¿Se puede aplicar los principios que funcionan en una cancha de futbol al management empresarial?
Sobre estas dos preguntas girará este artículo y si te quedas hasta el final te regalaremos una frase que pondrá en jaque tu entendimiento de lo que es un buen management.
En Cratorn, creemos en desafiar el status quo, por ello buscamos ideas inesperadas que nos impulsen a pensar diferente, porque solo pensando fuera de la caja podremos transformar nuestro entorno e impactar en nuestra realidad. Luego de años de ejercitarnos en esta habilidad descubrimos que estas ideas suelen surgir en la intersección de distintas disciplinas y saberes, a esto le llamamos pensamiento de frontera o pensamiento liminal.
Aquí te contamos cómo lo logramos:
A.
Por un lado está Jürgen Klopp, entrenador alemán de fútbol, conocido por su estilo carismático y su filosofía de juego ‘gegenpressing’ . Una estrategia que transformó al Liverpool en un equipo dominante, logrando importantes títulos.
B.
Por el otro, el contexto mundial definido por el modelo BANI (frágil, ansioso, no lineal, incomprensible), donde la fragilidad, la ansiedad y la complejidad son la norma. Contexto que traspasa el mundo de los negocios en general y del management en particular.
AB
En la intersección entre el enfoque futbolístico y el contexto mundial-empresarial nos preguntamos
¿Puede el ‘estilo Klopp’ guiarnos para construir equipos antifrágiles y operativos, capaces de prosperar en medio del caos?
¿Cuál es la estrategia de juego de Klopp y por qué puede servirnos en el management?
El enfoque de Klopp se basa en tres pilares: intensidad, velocidad y presión constante. Su objetivo no es solo ganar, sino dominar el juego, dictar el ritmo y mantener el control del balón para generar oportunidades.
Ahora analicemos algunas de sus tácticas.
Gegenpressing: la presión como respuesta al caos.
La marca distintiva del juego de Klopp es la presión inmediata tras perder el balón, lo que requiere actuar antes de que el oponente se recupere. Pero ¿Cómo se aplica esto en el mundo empresarial? Este enfoque lleva a anticiparse no solo a los problemas, sino también a los cambios del mercado, las nuevas legislaciones o demás situaciones externas o internas que influyen en la organización. Aquí, el éxito radica en la rapidez y decisión con la que un equipo enfrenta el caos, generalmente la clave es ser proactivo.
En entornos BANI, no hay tiempo para la indecisión. ¿Quieres medir cuánto de gegenpressing tiene tu organización en el ADN? Dime cómo reaccionaron frente al COVID, qué tan rápido se adaptaron a los cambios del contexto y prosperaron a pesar o gracias a ellos.
Contraataque letal: la velocidad en la transición como arma estratégica.
Así como Klopp se vale de transiciones veloces para tomar desprevenidos a los rivales, de manera similar, en el ámbito empresarial, las empresas deben aprovechar los momentos clave para innovar o pivotar su estrategia con rapidez. En un entorno BANI, esta habilidad para pasar de la defensa al ataque puede marcar la diferencia entre mantenerse a flote o quedar fuera del juego. La clave está en actuar antes de que los competidores se adapten. Arriesgarse, ser audaces.
El “pressing forward”
Este rol consiste en un jugador que persigue al rival, buscando errores para recuperar el balón. En el mundo corporativo, los “pressing forwards” son aquellos empleados que identifican oportunidades y vulnerabilidades en el mercado, anticipando y resolviendo problemas antes de que escalen.
El “motor del medio campo”
Similar al centrocampista que coordina el ritmo del juego, el “motor del medio campo” en una empresa puede estar en áreas como operaciones o planificación, encargado de mantener la fluidez y asegurar que el equipo no pierda el ritmo en sus operaciones diarias. Son los que aseguran la continuidad y afinan los procesos.
Presión en bloque y transición rápida:
Así como el equipo de Klopp coordinaba la presión en bloque para cerrar espacios, en una empresa, el equipo necesita una comunicación y colaboración sincronizada para adaptarse rápidamente a nuevas circunstancias. La capacidad de reacción en bloque les permite abordar el caos con una respuesta contundente.
Roles funcionales y patrones conductuales
En el sentido anterior, este punto es fundamental: cada jugador cumple un rol funcional específico, el objetivo es maximizar sus fortalezas individuales así como sus contribuciones al equipo. Esta estructura permite llevar adelante una estrategia clara, incluso en entornos inciertos. Aquí destacamos la importancia de afinar la contratación, no solo desde el punto de vista técnico, académico, sino, sobre todo: humano y sus habilidades emocionales, tanto como ejecutivas.
Pasión y espíritu de equipo.
Klopp, como líder, fomentaba una conexión especial entre sus jugadores, quienes luchaban con entrega total tanto por el balón como por sus compañeros. En un entorno corporativo caótico, esta solidaridad es esencial. Un equipo alineado con un objetivo común y apoyado por una cultura de colaboración puede superar cualquier desafío. La sincronización y coordinación de los jugadores de Klopp son cruciales para ejecutar la táctica, tal y como los colaboradores lo son en los equipos. En tiempos de crisis deben actuar en armonía, alineando cada área de la organización hacia un propósito compartido.
Creación de ventajas en el caos: Recuperación rápida y movimientos coordinados.
Si lleváramos la filosofía de Klopp —de recuperar la posesión cerca del área rival mediante presión alta y movimientos coordinados, con el fin de crear oportunidades cerca del área rival— a la gestión empresarial, implicaría responder rápidamente a situaciones adversas y trabajar en sincronía para crear “ventajas tácticas” antes de que los problemas se agraven.
Implementando del modelo Klopp en la organización
En un entorno BANI, los líderes deben formar equipos ágiles, antifrágiles y cohesionados, listos para actuar con rapidez y eficacia ante cualquier desafío, de ahí que este método de juego, aunque requiere compromiso y entrenamiento constante, puede ser de gran ayuda para obtener una ventaja competitiva en tu sector.
- Entrenamiento especializado: no se trata solo de habilidades técnicas; el equipo debe aprender a tomar decisiones rápidas y eficaces bajo presión. Simulacros y entrenamientos regulares ayudan a mantener esta mentalidad, donde las habilidades interpersonales (con otros) e intrapersonales (con uno mismo) son fundamentales.
- Comunicación continua: así como los jugadores de Klopp mantienen una comunicación constante, los equipos deben compartir información clara y precisa para evitar malentendidos y reaccionar rápidamente. La confianza mutua es la clave.
- Adaptabilidad y flexibilidad: la capacidad de ajuste es fundacional. Aunque el modelo tiene principios sólidos, tanto los jugadores como las organizaciones deben adaptarse y evolucionar según las necesidades del momento.
- Paciencia y perseverancia: la consistencia es crucial. Los equipos deben confiar en el proceso y persistir, incluso sin resultados visibles. El éxito nunca es inmediato.
La presión solo existe cuando se pierde la confianza.
Jürgen Klopp
El liderazgo no se trata solo de navegar el caos, sino de aprovecharlo. El estilo de Jürgen Klopp nos enseña que, con unidad, confianza en las habilidades del equipo y de las personas que lo integran y rapidez de acción, podemos transformar la incertidumbre en un campo fértil para el éxito.
Es hora de liderar con audacia y abrazar el caos como un catalizador del cambio, y recuerda no perder el espíritu lúdico en tu gestión.
¿Cuál de estas dos frases puede convertirse en un game changing?
Comparte tu respuesta en los comentarios.
Los jugadores tienen que divertirse mientras juegan, si no, algo está mal.
Jürgen Klopp
0 comentarios